martes, 10 de abril de 2012

Bonito, bello, bueno, perfecto...

Los estudiosos de la estética y los filósofos aún no se han puesto de acuerdo en la definición de la belleza. La belleza no se define, se reconoce. Es una cualidad, un concepto, un sentimiento, que se caracteriza por su relatividad: no hay un criterio universal a pesar de que existen aproximaciones, acercamientos a la perfección que no existe más que como ideal. Muchos estudiosos consideran que la belleza es lo que resulta agradable a los sentidos y que por consiguiente causa placer, pero no todo lo que nos causa placer tiene por qué ser bello.

La clase de hoy nos ha dado para pensar sobre que es bello y que no lo es, para cada individuo, para cada grupo social, para cada raza, para cada época, existe un modo particular y diferente de percepción estética. Los cánones de belleza no sólo tienen que ver con el cuerpo. Para los egipcios faraónicos, la belleza consistía en armonía, perfección, bondad. Tenían gran preocupación por mantener el cuerpo lo más perfecto posible y la limpieza corporal también era muy importante para ellos. En otras partes del mundo, como en algunas tribus africanas, los senos femeninos flácidos y caídos casi hasta la cintura, son un símbolo de belleza. En otras se insertan aros en los lóbulos de las orejas o los labios, y se clavan en diversas partes del cuerpo huesos de animales. En numerosas culturas de la Polinesia, y en países asiáticos como Japón, China o la India, el uso de los tatuajes eran y continúan siendo símbolos de belleza.

En Tailandia, en la tribu de los padaungs, sus mujeres son conocidas como “las mujeres jirafa”. Su belleza se mide por el número de anillos que tienen alrededor del cuello. Cuando una mujer comete adulterio le retiran los anillos, dejándola impedida, con la amenaza permanente de fractura en su columna cervical. En Oriente Medio las mujeres se embellecen pintándose partes del cuerpo o empleando sustancias aromáticas elaboradas con productos naturales, como la henna. Podríamos seguir poniendo ejemplos si continuáramos buscando información, pero comprobamos que la belleza es un concepto muy objetivo, ya no cada tribu, sino cada persona puede entender la belleza de una forma diferente. Hoy lo hemos comprobado cuando Jorge a expuesto una actividad en la que durante 5 segundos había que hacer algo bello en el “tránsito”. Aquí tenéis el resultado y la gran variedad de bellezas que hemos visto en 3 minutos.





La belleza no hace feliz al que la posee, sino a quien puede amarla y adorarla. (Herman Hesse)

Artustin

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